– Ricardo Rocha y Heriberto Murrieta coinciden en que María Félix cambió el papel de la mujer en México, en una época en que la sociedad usualmente la reducía a ser esposa o madre.
Cuando las mexicanas acudieron por primera vez a las urnas fue en 1955, gracias a la organización e intervención de grupos feministas en foros demandando derechos ciudadanos como votar y ser votadas.
En esa fecha, María Felix ya había pasado por un divorcio, era madre soltera, trabajaba, no necesitaba de ningún hombre para ganarse la vida y, sobretodo, no buscaba quien la dominara.
En otras palabras, María fue una feminista aun en una época que no eran tan visibles o el papel de la mujer en la sociedad usualmente se reducía al de ser esposa o madre.
Así la recuerdan Ricardo Rocha y Heriberto Murrieta, dos de los comunicadores que no solamente tuvieron la oportunidad de entrevistarla en varias ocasiones, también a la larga se convertirían en sus amigos.
“Sin duda, María fue una mujer adelantada a su época, en un momento en el que hoy todos los peldaños que ha conseguido la mujer aún no se tenían. Ella siempre incitaba a la mujer a ser autosuficiente, a prepararse, a no dejarse ni del hombre ni de nadie. El empoderamiento lo ejerció desde siempre, desde el momento en que siendo una desconocida dijo “quiero el primer crédito de la película”, aun cuando estaba ahí Jorge Negrete”, detalló Rocha.
El poder de Félix, además, hizo que incluso los gobiernos de aquel momento la escucharan, en una época en la que ser contestatario tampoco era algo recurrente.
“Me acuerdo la vez que reclamó al gobierno por lo mal cuidado que estaba el Centro Histórico, ella no tenía miedo, sabía que su voz se escuchaba y así fue porque al día siguiente de aquella platica con Vero (Castro), las autoridades mandaron a limpiar y a alumbrar el primer cuadro del Centro. Cosas de éstas que solo un icono como María habría logrado en esa época”, recordó Murrieta.