La actriz australiana que interpreta a Harley Quinn en la película «Aves de presa» dice que es una mujer en constante liberación
Se podría decir que, a sus 29 años, la actriz Margot Robbie tiene casi todo: es millonaria, una celebridad hollywoodense, ha estado dos veces nominada al Oscar y su belleza es innegable.
Ahora, a punto de cumplir 30, se mete de lleno a producir y confiesa que, aunque siente que tiene una vida privilegiada, aún tiene miedos e inseguridades, mismos que, en lugar de deprimirla, la motivan a seguir haciendo mejor su trabajo y meterse cada vez más de lleno en la parte de la producción.
“Claro que todo el tiempo tengo miedo y siento presión de lo que hago o voy a hacer y creo que eso está bien. Sentir sobre tus hombros más responsabilidad sólo hace querer mejorar, ser mejor actriz, involucrarte más en los proyectos y saber que las cosas a veces pueden no salir bien pero, entre más lo intentes, más lo perfeccionas”, dijo Margot en entrevista con EL UNIVERSAL tras la premier de la cinta realizada ayer en Proyecto Público Prim de la Ciudad de México, al que acudieron también las actrices Jurnee Smollett-Bell y Mary Elizabeth Winstead.
En su visita a México, este interés de la actriz australiana por querer mayor responsabilidad en los proyectos la llevó a producir Aves de presa, donde se vuelve a meter en la piel de Harley Quinn, papel que le dio popularidad en 2016 cuando estrenó Suicide squad.
“Regresar a este papel y en esta película provocó mucha presión porque sé qué hay millones de fans del universo de DC y los cómics, pero eso hizo que quisiera estar más involucrada en el proyecto y producirlo. Quería tener a los mejores escritores, a los mejores técnicos y a la mejor gente involucrada en él. Queríamos que los fans se sintieran satisfechos, que vean que respetamos a sus personajes”.
En esta nueva aventura, Harley ha dejado a su eterno novio Joker, y ha decidido emanciparse y ser la dueña de su vida, algo que le costará caro, pues todos sus enemigos querrán ir tras su cabeza, situación que ella va a enfrentar en compañía de otras mujeres.
Aunque la también modelo dejó su natal Australia siendo muy joven, comparte la visión de su personaje Harley y considera que para crecer en cualquier ámbito es importante la emancipación, sólo así uno descubre quién es.
“Uno constantemente se emancipa, no es como que sólo lo hagas una vez, es decir, uno se desprende y deja atrás a personas y sólo así se redescubre y eso te hace madurar. Yo me he emancipado muchas veces en mi vida, desde que dejas a tu familia hasta que te cambias de casa o incluso terminas relaciones”.
Si bien ya antes había coproducido Birds of pray, es la primera cinta que produce en grande y esta misma semana estrena en el festival de Sundance la cinta Promising young woman con Carey Mulligan como actor principal.
Margot revela que, si bien le gusta protagonizar películas de gran presupuesto, son éstas las que le dan el dinero y nombre para poder levantar otros proyectos más pequeños e íntimos.
“Todos amamos las películas de acción. Creo que los actores buscamos los grandes proyectos para levantar los pequeños”, dijo.