– Los actores asistieron juntos a un evento.
Gabriel Soto e Irina Baeva siguen dando de qué hablar, la pareja por fin apareció en un evento público, pero lejos de que esto reafirmara que todo va bien entre ellos, desató más dudas, pues su comportamiento fue extraño.
Después de que por meses no se dejaran ver juntos, ni en redes ni en eventos, y se dijera que el actor de 47 años hasta había comenzado un romance con la actriz colombiana Sara Corrales, hace unos días callaron bocas al publicar una foto juntos, eso sí, ni abrazados ni besándose.
A pesar de esta «muestra» de que todo marcha bien, las evasivas del actor cuando se le cuestiona por Irina, refuerzan las versiones de algunos sobre que Irina y Gabriel no pueden anunciar su truene porque tendrían compromisos profesionales conjuntos que cumplir.
Irina, quien ha asistido a programas y ha ofrecido entrevistas, ha asegurado que la relación con Gabriel sigue, y que supuestamente ya no comparten fotos porque están en otra etapa de la relación.
La rusa sostiene que la boda sigue en pie y que nos les importa lo que se diga sobre ellos.
Abrazos entre Irina Baeva y Gabriel Soto, era junio de 2022. Clasos.
El extraño comportamiento de Gabriel e Irina
No se sabe si llegaron juntos, sólo fueron captados hombro a hombro en un evento de una marca de celulares, y distinto a lo que antes hacían, como estar de la mano y darse besos, en esta ocasión no se vio nada de esto, cada uno estaba por su lado.
De acuerdo a un video dado a conocer en «Venga la Alegría», en un momento Gabriel, al darse cuenta que lo estaban grabando, toma por la cintura a Irina, sin embargo la mayor parte del tiempo se comportaron como amigos y no como pareja.
Según versiones, fueron contratados como marca, ella como embajadora y él, para que asistiera durante 80 minutos; en un momento, cuando Baeva toma la palabra, Soto la graba con el celular.
Cuando el evento terminó salieron juntos, pero llamó la atención que ella iba de copiloto, mientras que él estaba en la parte trasera del auto.
Este extraño comportamiento genera de nuevo dudas sobre el status real de su relación, la cual, se dijo, había sufrido un complot por parte de Geraldine Bazán, la expareja de Gabriel, de quien se dijo en una revista de circulación nacional, que había orquestado junto a Sara Corrales un complot para separar a Gabriel de Irina.
Sin decir nombres, Geraldine agradeció que fans y medios de comunicación no atendieran dicha información falsa, pues aseguró, todo es una mentira.