– La actriz acudió al Festival de cine de Guadalajara para participar en el «Nosotras en el cine”
Pasaron cuatro años y el estreno de «La caída», filme que protagonizó y produjo, para que Karla Souza se sintiera de nueva cuenta bienvenida en México.
En los albores de 2018 la actriz de «Nosotros los nobles» denunció haber sufrido abuso sexual por parte de un director, de quien jamás reveló su identidad, algo que le trajo repercusiones a su carrera.
Desde entonces prácticamente radicó en Los Ángeles, sin regresar a México donde iba con una carrera ascendente en los escenarios.
“Luego de hablar de que fui víctima y recibir ataques físicos, vino el perder amigos, ser cancelada, perder todas las marcas que tenía, nadie quería asociarse con ese tema y mucho menos con una persona”, recordó esta tarde la actriz.
“Sentía que de alguna manera había estigmatizado, aún más, el caminar de una sobreviviente y por eso cuando salió La caida (2022) que trata del mismo tema y que yo regresara hablar de ello, que mi voz fuera el cine, (se tuvieran) criticas impresionantes y sensibles, todo eso hizo que yo me sintiera invitada a mi propio país”, reveló.
Karla estuvo esta tarde en el panel «Nosotras en el Cine» dentro del Festival Internacional de Cine en Guadalajara, donde se habló del trato a las las mujeres en el séptimo arte nacional, como el hecho de que se les pague menos por el mismo trabajo, en relación con un hombre, así como propuesta de solución.
“Que no entren solas a un proceso de casting, que pregunten cuántos están cobrando las otras personas, que manden mensaje a alguien que sepa, yo por ejemplo cuando me fui a Los Ángeles no conocía a Ana de la Reguera y le mandé por instagram un mensaje y se sentó conmigo a decirme qué hacer”, aconsejó.
En el conversatorio estuvieron también la productora Mónica Lozano (No se aceptan devoluciones), la cineasta Catalina Aguilar Mastretta y la escritora y actriz María Reneé Prudencio.(Señorita 89).
Karla recordó que en los inicios de su carrera realizó varias audiciones para participar en informales, pues aunque había estudiado en Londres, sabía que todo era experiencia que la iría nutriendo.
En su momento, indicó, una aliada le recomendó que cuando se reuniera con alguien en términos laborales debía salir como si fuera un “cabrón”, en alusión a no dejarse.
Pero hay otras maneras, consideró, en que puede obtenerse respeto, como el no dejar que le llamen en diminutivo.
“Que no me digan Karlita, son cosas que sin querer estar entre las comunidades de cómo me presentan, prefiero me digan Karla”, apuntó.
Durante la charla, la actriz reveló escuetamente que se encuentran laborando en una película que abordará el tema sobre el trabajo doméstico.