Viva la farandula

Lady Gaga incendia el estadio GNP vestida de rojo sangre; «te amo, México», exclama

Farandula

– «Bloody Mary» y «Abracadabra» marcaron el inicio de la primera noche de Gaga en la Ciudad de México

 

El Foro GNP se llenó de little monsters vestidos con outfits de las épocas más representativas de Lady Gaga.

Con música de fondo, los asistentes tomaban sus lugares y hacían la típica ola. A las 9:15, los músicos y bailarines ocuparon sus lugares sobre una estructura que recordaba a los palcos de un teatro antiguo, en ruinas o a punto de nacer. El estadio, todavía sumergido en penumbra, se puso de pie de manera casi instintiva.

 

 

Entonces vino el grito: “Gaga, Gaga”, y la oscuridad respondió. En la pantalla, el Manifiesto Mayhem —parte anuncio, parte invocación. En lo alto, como en una ópera, Gaga surgió atrapada dentro de un vestido que poco después revelaría su truco: era una jaula viviente que contenía a sus bailarines. «Bloody Mary» y «Abracadabra» marcaron el inicio de la primera noche de Lady Gaga en nuestro país.

Lady Gaga incendia el estadio GNP vestida de rojo sangre; «te amo, México», exclama. Tomada de video

Una carta de amor a México

«Te amo, México», repitió Gaga en varias ocasiones, pero hubo un momento que detuvo el tiempo: sentada frente al piano, la cantante leyó una carta escrita en español para sus fans.

«A todos mis hermosos pequeños monstruos, aquí esta noche es un honor para mí estar en su hermoso país presentándome para ustedes. Han pasado 13 años desde la última vez que estuve aquí. Espero que vean cuánto he trabajado duro en el escenario esta noche para demostrarles cuánto los admiro y respeto», leyó la artista frente a todos.

Fue así que confesó que el amor y la pasión que encontró en aquella visita marcaron su carrera para siempre.

“Nunca olvidaré la emoción y la pasión que compartieron conmigo. Estoy orgullosa de compartir este momento nuevamente. Solo que esta vez, no es el final… sino el principio”, dijo, arrancando lágrimas y aplausos.

En medio del acto, buscó entre el público a un viejo amigo: «¿Dónde estás, Alejandro?», preguntó, para entonar el himno de 2009 incluida en el tercer EP, The Fame Monster, 

Dividido en cinco actos, el concierto fue un recorrido por la evolución de Gaga: desde su estética más teatral hasta sus momentos más vulnerables.

Después, en una caja de arena junto a un esqueleto, interpretó “Perfect Celebrity” vestida de blanco, como un fantasma de sí misma.

 

 

Bailarines con máscaras de calaveras emergieron para «Disease», mientras un cuerpo femenino completamente de rojo surgía de la arena, abriendo paso a «Paparazzi», donde Gaga apareció apoyada en muletas y envuelta en una enorme tela que fungía como capa.

Cada elemento escénico tenía vida propia. Una batería improvisada acompañó el cambio de vestuario, y durante “Die With a Smile” y “How Bad Do You Want Me”, Gaga se mostró más cercana, gritando entre canciones: «¡Te amo, México City!».

Uno de los momentos más íntimos de la noche llegó cuando presentó «Blade of Grass», una balada dedicada a su prometido Michael, que cantó por primera vez en vivo.

“Solo quería recordarles que el amor puede hacerlos muy felices”, dijo frente al piano. Después, llegó la ovación con «Shallow», canción que reconoció como una sorpresa en su carrera, algo que jamás imaginó que se volvería un fenómeno mundial. Pidió al público que cantara con ella, y Ciudad de México respondió. 

El cierre fue con las canciones «Vanis Into You» y «Bad Romance» y este domingo la cantante tiene otra cita con sus fans en la segunda fecha de su tour Viva la Mayhem.