La polémica expareja volverá a verse las caras en un nuevo juicio en el que ya alistan a sus testigos
De nueva cuenta Amber Heard y Johnny Depp se verán las caras en la corte, porque el 11 de abril iniciará en Virginia, Estados Unidos, el juicio por difamación que la estrella de «Piratas del Caribe» interpuso en contra de su exesposa.
Fue en marzo de 2019 cuando Johnny Depp interpuso la demanda, en la cual pide 50 millones de dólares a la actriz por un artículo de opinión que ella publicó en el diario Washington Post de 2018, en el cual habló como sobreviviente de la violencia doméstica, sin mencionarlo, pero ya había referencia desde 2016 de acusaciones de maltrato cuando inició su divorcio.
El actor ya había perdido un pleito legal en Reino Unido en contra del tabloide The Sun, por calificarlo en una publicación como golpeador de esposas, pero su querella fue desestimada al confirmar que lo dicho por el medio era sustancialmente cierto y a pesar de que trató de anular la resolución hace un año, su petición le fue negada.
Basada en esto Amber trató de detener la demanda de Depp en Estados Unidos, alegando que debía prevalecer la resolución del juez británico, ya que ambas abordan el tema del maltrato del actor hacía ella, pero un juez de Virginia le concedió el derecho al actor de seguir con su proceso legal.
El sitio Deadline informó que Amber Heard llamará a declarar a James Franco, la actriz Ellen Barkin y el director ejecutivo de Tesla, Elon Musk, como testigos en el juicio; respecto a este último, Depp menciona en su demanda que su exesposa tuvo un romance con Musk, a tan sólo 15 días de haber contraído matrimonio en 2015.
Del amor al odio
Depp y Heard se conocieron en el set de la comedia de 2011 “The Rum Diary” y se casaron en Los Ángeles en febrero de 2015. Heard, una modelo y actriz, solicitó el divorcio al año siguiente y obtuvo una orden de alejamiento contra Depp argumentando abuso doméstico. El divorcio quedó formalizado en 2017.
El Tribunal Supremo emitió su decisión después de un juicio de tres semanas que capturó la atención de la prensa en julio, cuando Depp y Heard rindieron declaraciones opuestas sobre su breve pero tempestuoso matrimonio y se acusaron mutuamente de ser controladores, violentos y mentirosos.
Durante el juicio, Depp reconoció tener problemas de drogas pero acusó a Heard de inventar las acusaciones de abuso e insistió en que él no era una persona violenta, “en especial con las mujeres”.
Calificado como «el mayor juicio por difamación del siglo XXI en Inglaterra», el caso sacó al sol los trapos más sucios del tumultuoso matrimonio.
El tribunal escuchó escabrosas historias sobre abuso de drogas, heces en la cama matrimonial, sospechas de infidelidades y un dedo seccionado con una botella durante una violenta pelea.
Reconociendo abusar de los estupefacientes y el alcohol, el actor aseguró que en sus años de matrimonio con Heard se drogaba tanto que «no estaba en condiciones» de lastimarla.
Y que nunca le había puesto la mano encima a una mujer, afirmación que apoyaron los testimonios escritos de sus exparejas Vanessa Paradis y Winona Ryder.