En este tenso juicio se han destapado las adicciones de Johnny Depp y la tormentosa relación con la actriz Amber Heard
Acusado de “agresor de mujeres”, Johnny Depp afronta la semana próxima la recta final del juicio que dirime su demanda de difamación contra el tabloide The Sun, un proceso marcado por el escandaloso cruce de acusaciones entre el actor y su exmujer, la actriz Amber Heard.
Depp, de 57 años, exige una compensación al diario británico y a su director, Dan Wootton, por un artículo de abril de 2018 que afirmaba que existían pruebas claras de violencia machista contra su antigua esposa, a quien supuestamente había causado lesiones importantes.
Fue el calificativo de «agresor de mujeres» en el titular de ese texto lo que, según ha dicho, llevó al actor a querellarse contra la poderosa cabecera, en un tenso juicio en el que se han destapado sus adicciones y la tumultuosa relación con Heard.
Conserjes, asistentes personales, exnovias como Winona Ryder y Vanessa Paradis han declarado en este proceso en el Tribunal Superior de Londres, que culminará con la próxima intervención de Heard y eventualmente el dictamen, en una fecha aún por determinar.
Depp y la actriz de 34 años se conocieron durante los rodajes de la película “Los Diarios del Ron” en 2011, se casaron en febrero de 2015 en Los Ángeles y 15 meses después se divorciaron en medio de la polémica.
El pasado 7 de julio, se encontraron de nuevo en la corte londinense, para un juicio de tres semanas en el que, además de ellos, también testifican antiguos y actuales empleados de ambos, médicos y familiares y amigos, muchos por vía telemática.
La abogada del periódico, Sasha Wass, basa la defensa en los detalles que la intérprete estadounidense difundió sobre 14 alegaciones de violencia presuntamente ocurrida entre principios de 2013 y mayo de 2016.
Depp, que el pasado lunes concluyó una declaración de cinco días, aseguró en su testimonio que “la abusadora de la relación” era realmente ella, a quien también acusó de querer construir un “dosier” sobre su relación a fin de hacerse con una “póliza de seguros” y poder alinearse con el movimiento «MeToo».
Johnny Depp y Amber Heard se conocieron durante los rodajes de la película “Los Diarios del Ron” en 2011, se casaron en febrero de 2015 en Los Ángeles y 15 meses después se divorciaron en medio de la polémica. Foto: AP/EFE
Interrogado por los abogados, el protagonista de “Piratas del Caribe” hubo de repasar sus anteriores relaciones y detallar su historial de consumo de drogas y alcohol.
Según la defensa del periódico, la primera agresión llegó después de que Heard se riera de un tatuaje en el brazo de Depp en el que se leía “Wino forever” (“borrachuzo para siempre”), un juego de palabras que resultó de la modificación del original, en el que ponía “Winona Forever” (Winona para siempre), en referencia a su antigua novia.
Ante el juez, Depp reconoció llevar más de 40 años consumiendo estupefacientes, acusó a su ex de no apoyarle en su recuperación y culpó a su propia madre de una adicción que le llevó desde los 14 años a consumir “todas las drogas que existen bajo el sol”.
El juicio también recuperó una visita de la pareja a Australia en 2015 durante la que, de acuerdo con el diario, Heard aseguró haber sufrido “tres días de ataques” que acabaron con una casa “completamente destruida”.
Por su parte, el actor negó haber abofeteado y arrojado a Heard “contra una mesa de ping-pong que colapsó” y mantiene que la actriz le lanzó contra la mano una botella de vodka que le cortó la falange de un dedo.
También se retomó lo ocurrido en un vuelo privado de Boston a Los Ángeles en 2014, durante el cual el actor, según el equipo legal del rotativo, se enfadó con la actriz y presuntamente la abofeteó y dio una patada en la espalda -una versión que contradijo en la vista el exasistente personal de Depp, Stephen Deuters-.
La corte también escuchó a los porteros del apartamento de la pareja en Los Ángeles, Alejandro Romero y Trinity Esparza, que declararon como testigos de Depp acerca de lo ocurrido entre finales de mayo y principios de junio de 2016.
Esparza negó haber visto “heridas” en la cara de Heard en los tres días que siguieron al 21 de mayo, fecha en la que la actriz asegura que Depp le tiró un teléfono a la cara.
La empleada sí admitió haber visto una marca roja en el rostro de ella el 27 de ese mes, cuando la joven se disponía a pedir una orden de alejamiento contra el actor, si bien Esparza mantiene que él no estaba por entonces en el apartamento.
Aunque la defensa de Depp no llamó finalmente a declarar en persona a Vanessa Paradis y Winona Ryder, sí se hicieron públicas las declaraciones escritas que aportaron, donde ambas afirmaron que nunca fue violento con ellas.
«La idea de que es una persona increíblemente violenta es lo que más se aleja del Johnny que yo conocí y amé”, señaló en su nota Ryder, con la que el actor mantuvo una relación de cuatro años.
Paradis, con quien estuvo casado catorce años y tiene dos hijos, dijo que nunca fue «abusivo» con ella y que era «amable, atento, generoso y una persona y un padre no violento”.