– Chyno Miranda luce más repuesto después de meses con crisis de salud.
Chyno Miranda sigue en recuperación tras sufrir un caso grave de Covid-19 a finales de 2020 que lo llevó a una parálisis y otras complicaciones que cambiaron por completo su vida; el cantante sorprendió a sus fans tras darse a conocer una fotografía de su reencuentro con Nacho, su compañero musical.
Chyno y Nacho marcaron una era musical que ahora, con esta fotografía dada a conocer por el comunicador Irrael Gómez, ilusiona a sus seguidores, quienes celebraron en redes la imagen y especularon que podría venir música nueva de este dueto
En redes sociales, los seguidores de esta dupla musical externaron su sorpresa y alegría por saber que Nacho está cerca de Chyno, quien sigue en una lucha para vencer adicciones.
«Chyno se ve mucho más recuperado», «¿Son ideas mías o Chyno ya está volviendo a tener una mirada normal?», «Bendito Dios, estás mucho mejor, qué alegría», «Se ve cambiado, se ve más como el Chyno que conocemos, el cambio le sienta muy bien», se lee entre los comentarios.
El diagnóstico de Chyno es de una neuropatía periférica, que según doctores, es una consecuencia del daño a los nervios fuera del cerebro y la médula espinal. Se sabe que el cantante sigue hospitalizado y debe continuar con sus evaluaciones neurológicas, psicológicas y clínicas.
Chyno ha vivido un infierno
A finales del 2022, Chyno Miranda dio señales de vida después de que «desapareciera» de la escena pública por sus mal estado de salud; sin embargo, lo hizo en medio de la polémica por su salida del centro de rehabilitación Tía Panchita, donde aseguró, lo ingresó su familia en contra de su voluntad, por lo que intentó escapar varias veces sin éxito, hasta que hace poco por fin pudo salir.
Chyno reconoció que ha tenido muchos excesos, pero eso, dijo, es parte de la vida, y aunque estar en Tía Panchita le enseñó a tener paciencia, reconoce que no todo fue bueno.
“Muchos momentos perturbadores, de lejanía, me separaron mucho de mis seres queridos”, aseguró.
Sobre su llegada a ese centro de rehabilitación por drogas, Miranda enfatizó que fue ingresado en contra de su voluntad, sedado.
“Fui llevado en contra de mi voluntad a Tía Panchita, a mí se sedaron el 22 de diciembre en mi casa; llegué a Tía Panchita sedado con una inyección”.
Al estar ahí, pidió ayuda a los trabajadores del lugar, les ofreció dinero para que lo ayudaran a escapar, pero nadie accedió, así que intento tres veces huir sin éxito.
Ahora, se encuentra en una clínica privada, donde asegura que el trato es mejor, así como el personal.